La teleserie Cerro Alegre de 1999 era un triángulo de pasiones, una Caldera del Diablo, según lo que ha salido a la luz esta semana.

En la telenovela actuaron Pancha Merino, quien ese año era una de las reinas, diva de las producciones dramáticas, junto a una figuras más secundarias en esos tiempos, como Fran García-Huidobro y su amiga Ingrid Cruz.

Ahora Cruz y García-Huidobro, en el podcast que hacen juntas, pelaron a la otra. “Pancha Merino me hizo la vida imposible. Me pisoteaba las cosas. Me trataba de rota... Se metió en mi vida privada”, afirmó Ingrid.

Pancha respondió con una bomba: “Yo pololeaba con Luciano Cruz-Coke y ella (Ingrid Cruz) se lo t..., se lo agarraba, y ella trabajaba conmigo”. Después la repasó en Tal Cual: “Ingrid Cruz me tiene sangre en el ojo, porque le escribía por interno a Andrea (Marocchino, novio de Merino). Se lo quería conquistar”.

Al ruedo también salió el actor actor Andrés Gómez, otro integrante del elenco de Cerro Alegre, y amigo íntimo de Pancha, quien desmintió a Cruz y apoyó a su amigui, a través de un audio en Que Te Lo Digo:

“Ingrid Cruz hablaba sobre algo que pasó hace mucho tiempo con Francisca. Yo con Francisca tengo una relación de muchos años, somos muy amigos, un cariño que nos tenemos profundamente, lo que significa que hemos hecho este viaje en la vida en gran parte juntos, y he sido testigo de muchas cosas, buenas y malas. Y hay cosas que no concuerdo mucho, siendo que estábamos en el mismo elenco.

“Porque lamentablemente Ingrid, a quien también le tengo mucho cariño, pero no tenemos tanta relación, nunca vi que la maltratara, que le pisoteara cosas o lo que se está comentando, que es bien unilateral.

“Lo que dice Francisca es cierto, y a mí me costó mucho en ese momento, porque yo me enteré de esa situación y yo le tenía mucho cariño a la Ingrid, a Luciano Cruz-Coke y a Pancha. Entonces, yo no supe bien cómo enfrentar esa situación, emocionalmente no sabía cómo manejarla, cómo contarla. Y eso me costó dos años de no hablar con la Pancha. La Pancha se enojó muchísimo conmigo, porque yo no le había contado acerca de esa relación. Y me lo reclamó. Y para mí fue súper doloroso, súper duro.

“El maltrato al que se debe referir la Ingrid es porque a cualquiera nos dolería que un colega esté jugando de esa manera. Y yo creo que eso le dolió muchísimo a Francisca. Ahí empatizo con ella. Eso fue lo que detonó crueldad a lo mejor sentida por la Ingrid.

“Las cosas no se están contando como fueron, e insisto que es unilateral, y no es justo”.