El rito de la Gala de Viña 2025 era que, tras hacer una fila a veces de horas para poder ingresar a la alfombra roja en el Sporting Club, los invitados caminaban por la pasarela. Después se dirigían al llamado "corral de prensa", donde estaban todos los periodistas, camarógrafos y fotógrafos, para conversar con ellos.

Millaray Viera prefirió no realizar este último paso. No hablar con la prensa, como consignó Glamorama.

La comunicadora de 37 años se lució en la red carpet llevando una columna dorada -como hubo varias en la Gala- de la diseñadora chilena Makarena Montaner.

Recibió aplausos, felicitaciones de su pololo -el empresario Jorge Matte- a través de Instagram y una lluvia de piropos en redes sociales. Pero, como expresó este sábado hablando de su caminata por la alfombra roja, "el gesto final es porque ando sensible (¿lo soy?) y tanto cariño me emociona".

Según el reporteo de este sitio, Millaray no habló con la prensa en la Gala debido a su estado personal luego de que esta semana se dio a conocer el vuelco en el caso de la muerte de su padre, el cantante Gervasio. Una herida abierta para la familia del artista que falleció en el peak de su carrera y del cariño del público.

En 2013 el caso fue abierto y ahora su causa de muerte fue recaratulada de suicidio a homicidio.

La noche de la Gala, antes de entrar escena, a Viera ya le habían preguntado por el asunto. Un tema al que no deseaba referirse vestida de alta noche en medio de un evento tal. No era el contexto ni la circunstancia adecuada. Por eso se restó de micrófonos y cámaras.