Las mejores canciones no son solo las que tienen una buena melodía junto con una buena letra, sino las que la resuenan de manera distinta a través del tiempo. Y no hay mejor ejemplo de lo que es una buena canción en el mundo de la lucha libre que con Kingdom, el tema de entrada de Cody Rhodes y que el 7 de abril reventó los parlantes del Lincoln Financial Field de Filadelfia.

Y es que aun mejor que las guitarras y la letra que hace cantar a los fanáticos es la historia que hay detrás de una parte importantísima del personaje de la Pesadilla Americana que hoy porta el cinturón de Campeón Universal de la WWE.

La historia de Kingdom comienza con un hecho triste, cuando en mayo de 2016 Cody Rhodes pide que la WWE lo libere de su contrato, tras sentir que la empresa ya no lo estaba valorando. Rhodes estaba estancado con su personaje de Stardust, que estaba siendo relegado a peleas de relleno para los distintos programas, muy lejos de lo que había logrado junto a Randy Orton en El Legado.

Cody tenía muchas ideas y no tardó en ponerlas en marzo. En Agosto del mismo año, anunció en Twitter que tendría un nuevo tema de entrada: Kingdom, interpretado por la banda Downstait, un grupo de rock que ya había interpretado otros icónicos temas de entrada de la WWE como I Came to Play y Here to Show the World.

Rhodes compartió la noticia junto con trozo de la letra de la canción que es quizás la más significativa de la pieza.

La letra, traducida, dice en una parte “Mi padre me dijo cuando era más joven que los tiempos duros forman mejores hombres” y en el coro “Me quitaste todo, lo di todo, no puedes quitarme la libertad. Vine a cambiar el juego, una bandera hecha de dolor, construí mi reino”.

La canción fue elaborada por Downstait en un momento similar al de Cody, ya que su relación con la WWE y como banda no era la mejor. Ya estaban disueltos, cada uno en sus trabajos comunes, pero al ver la situación de Cody, se contactaron con el escribiendo la letra. “Hard Times Breed Better Men” es una frase que su padre había hecho famosa y desde ahí construyeron la letra que mostraría las intenciones de la nueva etapa de Cody.

A Rhodes le encantó y la transformó en su himno, llevándola primero a todas las peleas indies a las que fue, en su paso por ROH, Impact, New Japan y finalmente en AEW, la empresa que ayudó a fundar y que para muchos, ya era el “Kingdom” que prometía construir.

En AEW, Cody Rhodes construyó a su personaje del American Nightmare y envió claros mensajes a la WWE, como cuando destruyó, mazo en mano, al trono de Triple H. Parecía que la historia de su canción ya estaba relatada. Pero cuando Rhodes dejó AEW a comienzos de 2022 y se rumoreaba su llegada a la WWE en Wrestlemania 38, mucho se especulaba sobre el personaje que lo haría.

Por un lado, la Pesadilla Americana era el personaje que creció a pesar de la WWE, pero por el otro lado, era el ícono por el que la compañía lo quería buscar. Entonces la piedra de tope era una sola: la canción.

Los miembros de Downstait confirmaron que la WWE en un comienzo no quería que Cody Rhodes utilizara la canción, principalmente por temas de derechos. La WWE quería usar uno de los temas antiguos o bien crear uno nuevo, pero Cody Rhodes intervino de forma clara: sin Kingdom, el no firmaba con la empresa.

Y así, como el retador sorpresa de Seth Rollins, Kingdom sonaba por primera vez en un ring de la WWE, pero ahora con un nuevo significado: el reinado que Cody Rhodes buscaba construir ya no era el imperio que quería competir contra la compañía que lo desechó, sino que llegar a la cima de la compañía, obteniendo el título que se le negó a su padre Dusty Rhodes y lográndolo a punta de trabajo.

Hoy Cody Rhodes posee la corona, pero el camino para mantenerla y convertir su reinado en un legado que se recuerde ha comenzado. Y para ello, el mensaje de Kingdom no cambia: los tiempos duros forman mejores hombres y hoy Cody es el mejor campeón que la compañía podía querer para su nueva era.

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