Aunque solemos pensar que todos los perros son adorables y quieren y buscan la compañía de los seres humanos, o que siempre estarán dispuestos a jugar con los niños, la verdad es que las cosas no siempre son así.

Fue esta realidad la que motivó a un grupo de suecos a crear el concepto de la cinta amarilla amarrada al collar o a la correa del perro y que hoy se transformó en el denominado "Yelow dog proyect" (el "proyecto del perro amarillo", en español), una iniciativa que gana cada vez más adeptos en todos los países del mundo.

Y Chile no está al margen, porque ya se pueden ver en las calles de distintas ciudades a cachupines que portan estas cintas amarillas en sus collares.

De qué se trata

Pero, ¿qué significa el uso de esta cinta?

En lo concreto, es una advertencia para las otras personas respecto de que el perro no gusta de la compañía de los demás, ni de niños, ni adultos y, por cierto, tampoco de otros perros.

No se trata de que el perro sea peligroso o agresivo, sino que prefiere mantener cierta distancia del resto.

Motivos para ello hay varios, como que está en rehabilitación tras ser rescatado de una situación de abuso, o porque sufrió algún accidente y está en recuperación, o debido a que se excita demasiado con la presencia de otros canes y no logra controlarse, o porque está en un período de entrenamiento y no necesita distracciones.

En fin, motivos hay muchos, pero solución existe una sola y que está imponiéndose a nivel mundial: la cinta amarilla amarrada en el collar o en la cuerda.

Así que ya sabes, si ves acercarse a un perrito que porta el lazo amarillo no te asustes ni arranques, sólo apártate de su camino y no intentes acercarte para hacerle cariño o juguetear con él.

Pero si eres tú quien tiene un perrito que no soporta bien la presencia de extraños -humanos y caninos-, no olvides amarrarle una cinta amarilla en su collar.

Ah, y si puedes, explícale a las demás personas qué significa el uso del listón amarillo.