La captura de una pitón, que posteriormente es liberada en el bosque, es un acontecimiento de lo más habitual en algunas zonas de Tailandia. Sin embargo, lo que ocurrió la última semana, durante este particular proceso, llamó la atención de captores y el mundo entero.

Resulta que mientras la serpiente era transportada, comenzó a regurgitar un lagarto de la mitad de su tamaño. El impactante registro se viralizó en la web y hoy los expertos analizan el caso.

"Cuando tragan algo relativamente grande, puede hacerlos menos móvil, de este modo, cuando son acosados, es común que regurgiten la comida", explicó Max Nickerson, el curador de Herpetología en el Museo de Historia Natural de Florida, en una entrevista previa con National Geographic.

PITÓN GIGANTE

Según NG, las serpientes pitón tienden a regurgitar la comida más increíble ya que las serpientes en sí mismas son enormes. En promedio, una pitón de Burma puede llegar a pesar 90 kilos y tener hasta 7 metros.