Como ya hemos dicho en anteriores crónicas, el período de sociabilización crítico de un cachorro está entre las 4 y 12 semanas, durante las cuales el contacto con su entorno, con sus pares y con el ser humano resultan fundamentales para su desarrollo y comportamiento futuro.

El resultado de no sociabilizarlo oportunamente suele dar como resultado un perro agresivo o temeroso, que suele convertirse en un problema para sus amos, sobre todo al momento del paseo.

Sin embargo, un perro adulto que resulta agresivo con sus pares debido a falta de sociabilización cuando cachorro puede aprender a convivir con ellos a través de un programa de "sociabilización remedial", que consiste, entre otras, en tomar las siguientes medidas:

1. El perro debe conocer gran cantidad de congéneres siempre con la correa puesta y un bozal si es necesario.

2. Los ejercicios deben comenzar a distancia y con mucha precaución. El perro debe estar a una distancia segura y ambos perros con correa, tanto nuestro sujeto de rehabilitación como el ejemplar de ensayo, que ojala sea tranquilo, sumiso y del sexo opuesto.

3. La distancia es muy importante, ya que ésta debe ser la suficiente como para que el perro que estamos rehabilitando permanezca tranquilo y de ese modo acepte premios de su guía. Si está tenso, los rechazará.

4. Cuando el perro a sociabilizar vea a distancia a otros perros se le deben dar muchos premios hasta que el otro se vaya. Los premios deben fluir constantemente y de manera generosa durante todo el tiempo que vea al otro perro a distancia. Cuando el otro perro se vaya, inmediatamente deben cesar los premios. Esta técnica se llama "desensibilización" y tiene como propósito que el perro asocie a los otros animales con los premios que recibe.

5. Después de varias sesiones notarás que tu perro que antes ladraba y gruñía ahora empezará a buscarte y a mover la cola al ver pasar otros perros. En este momento puedes disminuir un poco la distancia entre el perro a sociabilizar y los otros ejemplares que pasen frente a él.

6. Gradualmente, y siguiendo los mismos pasos anteriores, se puede continuar disminuyendo la distancia hasta que tu perro pueda estar perfectamente tranquilo junto a otros perros sin mostrarse tenso, agresivo, inquieto o miedoso.