La Organización Mundial de la Salud (OMS) celebró los resultados del ensayo clínico que demostró que la dexametasona, un corticoide barato y ampliamente utilizado, puede salvar la vida de pacientes en estado de gravedad debido a la enfermedad de coronavirus (Covid-19).

De acuerdo a la investigación publicada por la Universidad de Oxford, el medicamento fue probado en 2.104 pacientes al azar, quienes recibieron una dosis de 6mg una vez al día. Ya sea manera oral o a través de inyección intravenosa. En tanto, los resultados fueron comparados con 4.321 pacientes al azar que recibieron una atención habitual para el coronavirus.

Los médicos e investigadores de la Universidad británica, Peter Horby y Martin Landray, señalaron que la dexametasona redujo un tercio la mortalidad de pacientes hospitalizados con ventilación mecánica, y a un quinto de personas que solo necesitaron oxigeno.

El fármaco reduce el riesgo

"La supervivencia es mayor entre los pacientes que requieren respiración asistida, así que este medicamento debería administrarse a todos los pacientes en este estado. La dexametasona es barata, disponible y se puede usar desde ya para salvar vidas en todo el mundo", indicó Peter Horby.

"Aunque son preliminares, estos resultados son muy claros, la dexametasona reduce el riesgo de morir en pacientes con complicaciones respiratorias graves", agregó.

Por su parte, Martin Landray dijo que "desde la aparición del COVID-19 hace seis meses, se han buscado tratamientos que puedan mejorar la supervivencia, particularmente en los pacientes más enfermos. Estos resultados preliminares son muy claros: la dexametasona reduce el riesgo de muerte entre pacientes con complicaciones respiratorias graves".

"Es fantástico que el primer tratamiento que demuestra evitar muertes está disponible y es asequible en todo el mundo", añadió.

De la investigación se detalla que la mortalidad entre lo que necesitaban respiración asistida fue del 41%, mientras que los que necesitaban oxígeno registraron una tasa de mortalidad del 25%. Entre los pacientes que no necesitaron estas dos intervenciones fue del 13%. La dexametasona redujo un tercio la mortalidad en el primer tipo de infectados y un quinto en el segundo.

Entre los pacientes menos graves no se observó ningún beneficio.