Nada menos que 43 mil pesos cuesta en Londres, Inglaterra, una taza del café más carolio del mundo, el cual, aunque parezca insólito, debe su alto precio al hecho de que está hecho con caca de gato.

Sí, no es broma del Día de los Inocentes, porque el llamado "café raro" es tan sofisticado que no todos los paladares son aptos para apreciar sus cualidades.

El brebaje se prepara con dos tipos de granos, uno jamaiquino y otro de Indonesia, y es este último precisamente el que le otorga sus características exclusivas.

CATADORES

La cosa es como sigue: Los llamados gatos de Algalia viven en las plantaciones del país e, instintivamente, se alimentan sólo con los mejores granos de café.

Las enzimas de su sistema digestivo hace el resto y sus excrementos son luego recogidos, que limpia cada grano.

El kilo de este café se vende a 648 dólares en Londres.