Le sigue lloviendo sobre mojado al primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, famoso por coleccionar beldades tiernecitas para sus 72 años bien vividos y que le cuesta un tormentoso proceso de divorcio de su esposa, la bella cuarentona Veronica Lario.

Pero eso es harina de otro costal, ya que el periódico bachicha La Repubblica desclasificó una porción de 10 mil nuevas imágenes captadas entre 2007 y 2008 por el paparazzo Antonello Zappadu, en las que el premier hace de anfitrión de fiestocas en su mansión Villa Certosa, en Cerdeña.

No se trata de imágenes en las que lleno de protocolo figura junto a empingorotados jefes de Estado en visita oficial. No. Son fotelis en las que se le ve junto a minurris puro filete, onda corte tipo "V" o "A", y que bien podrían ser sus nietecitas.

Otros monitos captados por Zappadu muestran a sus invitadas tomando en sol a todo cutis, cubiertas sólo por una tenue capa de bronceador, cerquita de una piscina.

Como las fotos fueron tomadas a la mala y hay recursos aceptados por la justicia que velan por la intimidad de Il Cavaliere, Zappadu, que de tontito no tiene un pelo, las envió a la agencia colombiana Ecoprensa hasta totalizar nada menos que 10 mil imágenes exclusivas de las fiestocas de Berlusconi.

Por siaca la totalidad de las fotos es vetada en Italia, Zappadu se aseguró con una revista israelí, que está dispuesta a hacer el medio billete publicándolas para una cadena de hoteles en Europa.