La muerte de Muammar al Gaddafi dejó caleta de interrogantes y, aunque algunos se preguntan qué pasó con su ejército de vírgenes y enfermeras ucranianas, otros tienen dudas más profundas sobre el futuro del país africano.

Libia no tiene mucho que ver con Chile. A puro látigo, Gaddafi unificó a un montón de tribus y liderazgos locales. Además, el dictador usó el petróleo para financiar un lote de beneficios sociales para la pobla. Tanto así, que la esperanza de vida y el nivel educativo de Libia son lejos los más altos del continente.

Entonces, ¿qué va a pasar ahora? La Cuarta se contactó con Libardo Buitrago, analista internacional que está ojo al charqui con el conflicto. El moreno afirmó que el pijama de palo de Gaddafi representa el "inicio de la primavera en África".

"Este alzamiento era impensable hace un par de años, pero las redes sociales permitieron que la gente expresara su enojo y fastidio con el régimen. Este es un período más de preguntas que de respuestas", dijo Buitrago.

-¿Los rebeldes están preparados para dirigir al país?

-Ellos tienen que demostrar que el remedio no es peor que la enfermedad. Libia debe llamar a elecciones democráticas. Es un proceso largo, donde la principal preocupación es que se logre imponer un gobierno islámico.

-¿Por qué sería malo un gobierno islámico?

-Ellos son el sector más radicalizado, que pretende imponer la Sharia en la Constitución. La Sharia es la ley donde impera "el ojo por ojo y diente por diente".

-¿Y dónde queda la población?

-Este será un período de pacificación, donde aún no se van a detener los combates, porque Libia estaba en una guerra civil, entonces no se puede decir que con la muerte de Gaddafi se termina todo, pero es un comienzo y los rebeldes deben cumplir su compromiso de llamar a elecciones democráticas.

-Oiga, ¿el conflicto en Libia afecta a Chile?

-No, a Chile no le afecta para nada. El Gobierno sólo debe impulsar en la ONU que haya un restablecimiento de la paz y la democracia.

LÍDERES DE TODO EL ORBE LLAMARON A INICIAR LA PAZ EN LIBIA

La caída del régimen de Gaddafi no dejó indiferente a ningún mandatario del mundo.

Para el guaripola de Yueséi, Barack Obama, la muerte del coronel "marca el final de un capítulo largo y doloroso".

La canciller alemana, Angela Merkel, expresó: "La sangrienta guerra que Gaddafi emprendió contra su gente llega a su final".

El mandatario italiano Silvio Berlusconi afirmó que por fin la guerra terminó y en latín dijo "así pasa la gloria del mundo".

Por su litro, el canciller chileno Alfredo Moreno, destacó que "lo más importante es que esto crea una oportunidad para que haya paz y progreso".