La solitaria acción de una mujer generó conmoción. Tuvo que entregarse a la policía por temor a represalias.
Imacto generó en Haití la mortal acción de una mujer que masacró a una banda delictual que operaba en su barrio.
De acuerdo a distintos reportes de medios caribeños, la mujer se cansó de los constantes ataques criminales en la comuna de Kenscoff y planeó una mortal manera de frenar la violencia.
Según informaron medios como Noticias Kominotek, la dueña de casa preparó decenas de empanadas con un mortal ingrediente: aceite de oruga, un fuerte veneno utilizado en ese país para eliminar plagas agrícolas.
La mujer llevó el mortal regalo a los pandilleros y el resultado fue fulminante. Al menos 40 de ellos comenzaron a sufrir convulsiones y no recibieron atención médica oportuna.
Al ver el resultado de su acción, la mujer habría huído de su casa, aterrada por posibles represalias. Terminó entregándose a la policía y quedó bajo custodia.
Ante los uniformados, la responsable de la masacre aseguró haber actuado sola. Hasta el cierre de esta nota se desconocía su futuro procesal.