"Mi novia era muy recatada, pero la madre en la cama era una bestia". Con estas acalarodas palabras, un argentino bueno pa'l web se defendió dejar embarazada a su novia y su mamita en la ciudad de Buenos Aires.

Así de carepalta, pues el compipa se lavó las manos tras el condoro del año y le echó toda la culpa a los encantos de su suegra de 40, quien según su ardiente relato era como tonta para el dele que suene.

"Con mi novia de 22 años tenía un sexo standard, pero con mi suegra tenía todas las fantasías que se me ocurrían y nos matábamos en la cama", confesó sin asco Ariel durante una entrevista radia publicada por radial  AM Cooperación.

Sin embargo, lo más brígido es el dramón familiar que quedó en su ahora ex familia, donde ahora existen dos niños que además de ser hermanitos, son tío y sobrino.