Dos damas mexicanas que andaban arriba de la pelota y manejando un auto humillaron sin piedad a un policía municipal de Tijuana que las detuvo porque el oficial no tenía un iPhone 5 como una de ellas.

"¡Pobre güey! ¡Yo tengo iPhone 5!", le dice una al agente, burlándose porque usaba un teléfono celular de menor calidad al de ella.

Muy curadas ambas no le tomaron el peso a la gravedad de su situación y hasta se dieron el lujo, chasqueando los dedos, de encarar al policía para que las multara rápido.

Las borrachitas fueron denunciadas por una persona que sapeó que estuvo a punto de ser atropellada por las alegres chicas, y más encima trataron de escapar al control

Quedaron al descubierto en una grabación hecha por el compañero del policía insultado. Tras el show, las dos cayeron en cana.