La desgracia parece ser el sino que marca la vida de la pobre Xuxa, la cantante que se autoproclamó como la Reina de los Bajitos.

El viernes por la noche, mientras compartía con su hija Sasha, de 11 pepitas, y su ex marido y padre de la niña, Luciano Zsafir, el árbol navideño les jugó una mala pasada.

Lejos del espíritu pascuero, el pino verde hizo cortocircuito y provocó un incendió que redujo a cenizas su lujoso departamento ubicado en el sector de San Conrado, uno de los más cuicos de Rìo de Janeiro.

Más de 60 bomberos concurrieron a extinguir las llamas mientras un grupo de paramédicos trasladaba a Zsafir a un centro asistencial para que lo chequearan porque tenía principios de asfixia.

Xuxa y su hija resultaron ilesas y ayer por la tarde la presentadora llegaría hasta el estadio Maracaná para darle el vamos a la temporada navideña, que para ella tendrá otro saborcito.

MALA ONDA

Esta tragedia de la rubia animadora se suma a otras tan grandes como la vez que en pleno Festival de Viña, el Monstruo le respondía "chu-pa-lo" cada vez que ella cantaba Ilari lari lari é.

La Reina de los Bajitos durante su vida además enfrentó reiteradas acusaciones de satanismo.

Primero cuando surgió el mito que en una de sus canciones decía "el diablo es magnífico" al escucharla al revés, y luego cuando una revista la acusó de vender por 80 millones de euros su alma al col'e flecha. Xuxa que tiene mala suerte la chiquilla.