Cuatro agencias federales de Estados Unidos votaron la semana pasada para decidir si la compañía china de smartphones Honor era o no situada en su lista negra. Sin embargo, no hubo acuerdo para la decisión.

The Washington Post indicó que las autoridades no pudieron llegar a un acuerdo, por lo que la posibilidad de generar un bloqueo en contra de Honor está aún en suspenso.

Si Honor es situada en la lista, esto impedirá que firmas como Qualcomm e Intel le entreguen componentes clave para el desarrollo de sus dispositivos móviles y laptops. A favor de una sanción de este tipo están funcionarios del Pentágono y del Departamento de Energía. Sin embargo, el Departamento de Comercio y el Departamento de Estado no comparten esa postura.

¿En la ruta de Huawei?

Una medida de ese tipo ya afectó fuertemente a Huawei, el conglomerado que precisamente vendió a Honor, una marca enfocada en teléfonos de gama media, para que pudiese desarrollarse sin ser afectada por las sanciones del gobierno de Estados Unidos.

Como no hubo acuerdo entre las agencias federales, ahora la situación será revisada por encargados políticos. Si el tema no avanza, el presidente Joe Biden podría terminar zanjando el debate.

Tengan en cuenta que la sanción sobre Huawei se llevó a cabo bajo argumentos de seguridad nacional, lo que puso trabas que finalmente dinamitaron por completo la hegemonía de Huawei en el mercado de smartphones a nivel mundial.

Sin embargo, Honor no está involucrado en el negocio de las redes 5G, que fue uno de los principales factores que impulsaron la sanción contra Huawei por parte de la administración Trump. Al mismo tiempo, Honor no vende sus productos en Estados Unidos, por lo que no es tan fácil actuar en su contra.