Los floridanos Slimmy Cuare y Eterdrink están activos desde que el movimiento urbano era apenas una semilla. Su dúo La Finesse Jugg sale en flyers de cuando el trap chileno era puro campo y por apenas tres lucas podías ver a Dref Quila (nombre y apellido) y Pvblo (no Pablo) Chill-E en el mismo evento junto a Gianluca, Young Cister y Zonora Point.

Aun así, La Finesse siempre se ha mantenido como un tesoro oculto, una especie de secreto a voces. De hecho, lo primero que escuché de Slimmy Cuare no fue su proyecto solista, ni sus temas con Eterdrink, sino el beat que hizo para ‘Falopita de mi amor’ de Yung Represalia, uno de los primeros hits virales del trap underground chileno.

A La Finesse Jugg llegan los iniciados y los más curiosos. Los que viven buscando música nueva y distinta. Si alguien mira solamente la superficie, difícil que los encuentre porque la vitrina nunca ha sido mucha para los adelantados como ellos, sino más bien para sus colegas menos aventureros que corren detrás de las tendencias comerciales.

Yo sé que en la escena todos quieren pegarse, incluidos el Cuare con el Eter, pero, en más de cinco años siendo fan de ambos, puedo decir que hasta ahora nunca los he visto vender su alma para lograrlo. Contra viento y marea, La Finesse Jugg siempre ha defendido su visión artística. Su carrera está hecha en base a ser consecuentes.

Históricos, pioneros e íntegros, Slimmy Cuare y Eterdrink ofrecen una sustancia musical de alta pureza. Los volúmenes 1 y 2 de “Laflorexico’s”, su disco debut y la secuela de este, son lanzamientos que no le deben su sonido a otra cosa más allá de sus propias inquietudes y búsquedas. Absolutamente nada en ellos fue hecho para complacer al algoritmo.

Han pasado años desde la última entrega de La Finesse, pero, ahora que la escena está cada vez más fiel a las fórmulas (y por ende más predecible), siento que es el momento ideal para su regreso discográfico. Esa vuelta se concretó el pasado 5 de octubre con la publicación de “Long Live Finesse”, otro álbum de espíritu indómito.

Lo nuevo de La Finesse tiene guiños a su status de históricos, como la participación del reputado productor argentino 0-600, así como también de Rehm, el único productor chileno que alcanzó a colaborar con XXXTentacion. Las voces invitadas, que van desde el cotizado Kuroh hasta un personaje de culto como Tclix, también avalan este prestigio.

A no ser que sea para decir “ven que apoyamos el under”, las páginas que persiguen los clics no le dedicarán espacio a “Long Live Finesse”. El disco no va a batir récords de audiencia, ni hará que La Finesse Jugg se pegue. Slimmy Cuare y Eterdrink no están haciendo números, pero están haciendo historia. Al contrario de la mayoría, lo suyo sí tendrá larga vida.