El más chueco de los papis le probó la polola a su hijo y está arrepentido

Doctor:

Quiero que me dé un consejo certero, algo que me saque del atolladero en el que estoy metido.

Pasa que soy muy feliz con mi esposa y tenemos tres críos que ya se graduaron de la educación superior y van a emprender el vuelo.

Uno de ellos llevó a su polola a la casa y apenas la vi saltaron todas las alarmas.

Esa mujer, porque es mayor que mi hijo, retozó de lo lindo conmigo en la cama.

La dejé y me olvidé de ella hace unos años.

Hice como que no la conocía, pero apenas estuvo a solas conmigo se me tiró al dulce y no pude aguantar.

Casi nos pillan en pleno goce.

La volví a ver a solas y nos metimos a un catre a puro pasarlo bien.

Ella me pide mantener el secreto y dijo que si seguíamos, iba a terminar con mi hijo para que todo quedara piola. Si no, destapa la olla.

ALEJANDRO

Mi perro:

Eso que me dijo de que es feliz con su familia es puro cuento, porque usted es feliz encamándose dentro y fuera del matrimonio con cuanta mariposa se le ponga por delante.

Ya sincerados, le digo que lo mejor es que hable con su hijo y le cuente la verdad, que esa mujer es penca, que usted ya la probó y la ha seguido probando.

Le van a querer cortar la cabeza, pero es mejor andar con la verdad de estandarte o su vida se va a transformar en un maldito infierno.

Su mujer se va a enterar y lo van a mandar con viento fresco a la calle.

Pero como el mundo es un lugar de infinitas posibilidades, puede que su hijo se enoje, patalee y hasta le quiera aforrar por penca, y a la vez reconozca que la "milf" con la que anda es una chimbiroca y se aleje de ella.

Y hasta le agradezca el ser tan lacho, pero es una posibilidad.

Tus consultas y dramas de tipo amoroso pueden aparecer en la Ventanita Sentimental si las mandas a doctorcarino@lacuarta.com

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