Doctor Cariño:

La soberbia me mató. Estuve enamorada por mucho tiempo de un ex pololo. Él nunca me pescó después de que me dejó por otra. Pero yo fui tonta, porque pese a que andaba con una galla igual me juntaba con él a puro ponerle bueno.

Y después el hombrón se vestía y me dejaba botada. Pero ahora llegó con un ramo de flores y con una petición de matrimonio. Me emocionó, pero ya no sé qué responderle, porque sigue con la mina y de puro fresco quiere que vuelva con él para casarme.

No entiendo nada y no sé qué hacer.

Gisela

Gise:

Usted mismo se dio cuenta que el caballero vale callampa. Ya no tiene sentido ir a revolcarse con él si la hizo convertirse en patas negras y usted accedió. Nada le garantiza que no vuelva a actuar mal con la que sería su esposa.

Le recomiendo que se haga la loca, que no lo infle más y ahora disfrute de la vida en compañía de sus amigas, amigos y busque otro hombre. Usted levanta una piedra y se encontrará con centenares de príncipes azules,  trípodes y taladros humanos que la harán sentirse una princesa.

Tus consultas y dramas de tipo amoroso pueden aparecer en la Ventanita Sentimental si las mandas a doctorcarino@lacuarta.com