A pesar de que sus voceros digan que intentan lo contrario, la relación de Apple con el mundo del arte es cada vez más distópica. Si la semana pasada estuvo la polémica de su último comercial que fue interpretado por la comunidad creativa como si se tratara de “La Purga”, ahora un reporte de Bloomberg señala que la compañía estaría ideando un nuevo sistema para modificar la forma en la que se remunera a las estrellas y equipos de Hollywood detrás de su contenido.

El reporte señala que la división de entretenimiento de Apple ha estado en conversaciones con sus partners para incluir la popularidad de un programa para determinar cuánto es que se va a pagar por él.

La idea, según la compañía, es incentivar la producción de contenido de calidad que atraiga gente a su streaming Apple TV+ a través de bonificaciones que se repartirán en base a tres criterios: el número de gente que se sumó al streaming para ver una serie o película en específico, cuánto tiempo los usuarios pasaron viendo ese contenido y el costo del programa en relación con el tamaño de su audiencia. Se señala que estar dentro de los tres shows más vistos podría generar una bonificación de más de 10 millones de dólares por temporada.

Actualmente, dice el reporte, el modelo impulsado por Netflix es el de entregar grandes sumas de dinero a proyectos antes de que se hagan o que incluso terminan sin hacerse, el cual fue efectivo cuando los streamings necesitaban aumentar su librería de exclusivos o simplemente para asegurar la aparición de algún gran actor o director.

El plan, en todo caso, no está en su fase final ni tampoco tiene plazo para implementarse debido a que la compañía está recibiendo feedback de Hollywood para ver cómo poder implementarlo. Y por supuesto, Apple no está sola, ya que otras gigantes como Amazon y Netflix también estarían interesadas en cambiar el modelo actual que al parecer hace que las plataformas de streaming sean más caras.

Y es que para que esto funcione, las apps tendrían que hacer públicas sus cifras de visionado y usuarios de manera periódica y fidedigna, algo que actualmente depende solo de ellas y generan muy poca confianza en el público y sus recomendaciones de popularidad.