Fantasiemos un rato: tenemos un departamento nuevo, la estructura está firme, las paredes y el cielo ya están pintados, así que el paso siguiente es instalar el piso más apropiado. Opciones hay varias, pero universalmente lo preferido son específicamente tres de ellas: hablamos de la cerámica, los pisos flotantes y los cubrepisos, cada uno con características distintivas entre sí, como la capacidad térmica, el costo, la facilidad y velocidad de instalación, entre otras.

Emilio Guerra, docente del Departamento de Construcción y Prevención de Riesgos de la Universidad Federico Santa María (USM), sede Viña del Mar, es un experto en la construcción y específicamente en temas de pisos. En conversación con La Cuarta Constructor, explicó que al momento de decidir el tipo de piso que debemos elegir, "lo primero que se debe tomar en cuenta es el ambiente donde se va a instalar: interior, exterior, seco, húmedo, alto o bajo tránsito, y luego tener en cuenta el material base donde se va a instalar el piso: radier, losa radiante, terciado estructural e incluso otro revestimiento existente".

Agregó que "el ambiente va a influir en las opciones más recomendadas y el tipo de material base se relaciona con el tipo de adhesivos que generarán una óptima adherencia".

Por unas pisadas mágicas

Uno de los aspectos a considerar en el trabajo de instalación de pisos es la superficie en la cual haremos la labor, la que siempre debe estar nivelada, libre de polvo y otro tipo de materiales externos.

"Existen morteros predosificados para nivelación de pisos de hormigón que logran una terminación lisa para recibir cualquier revestimiento. Si la superficie es terciado estructural se recomienda que este esté atornillado y no clavado a no más de 15 centímetros de separación en sus bordes y 30 centímetros en los ejes centrales", aseguró el profesor de USM.

Emilio Guerra también se dio el tiempo de explicar cuáles son los aspectos más importantes a considerar para la instalación de los pisos más comunes en la construcción, los que podrá ver en los recuadros a continuación.

Cerámicas

- La cerámica para poder adherirse a una superficie lisa y limpia, debe hacerlo mediante morteros de pega predosificados. La tecnología ha avanzado a tal punto que existen distintas variedades especializadas ya sea para superficies de hormigón, madera, fibrocemento e incluso otro revestimiento liso y poco absorbente.

- En la limpieza, las cerámicas simplemente se humedecen y se limpian con paños no abrasivos. Sin embargo, existen productos de limpieza específicos para este material, los que aplican tentadores aromas y un aspecto más brillante y duradero.

- Este material presenta la gran ventaja de la durabilidad y resistencia al alto tránsito.

- Su desventaja es que es un material que absorbe la temperatura de otras superficies y en invierno pueden ser muy heladas.

Cubrepisos y alfombras

- Los adhesivos de contacto serán los principales aliados para pegar cubrepisos. Estos son los que se aplican tanto a la superficie como al material. Sin embargo, estos presentan la complicación de no tener un tiempo de ajuste o acomodo si es que se necesita alguna corrección.

- Por su composición, los cubrepisos acumulan mucho polvo y ácaros, por lo que la principal herramienta de limpieza es la aspiradora. Para sacar las manchas de su superficie existen productos especiales que no dañan el pelo de los cubrepisos y alfombras. La mantención periódica de este tipo de revestimiento es fundamental para alargar su vida útil.

- La gran ventaja de los cubrepisos es la rapidez de su instalación, porque la mano de obra es poca y los materiales adicionales son de fácil acceso y bajo costo.

- La acumulación de polvo y ácaros son su principal desventaja, ya que esto resulta un verdadero problema para las personas alérgicas.

Pisos laminados o flotantes

- Debido a su composición, los pisos laminados no deben ser pegados a la superficie, ya que por diferencias de temperatura estos se dilatan y es por eso que su instalación es flotante. Esto se aplica mediante un machihembrado que permite la unión entre las mismas palmetas, las que pueden ser golpeadas con una herramienta llamada taco para su calce completo, o bien por un sistema llamado clic, con el que basta con hacer presión para que se produzca la unión.

- Para la limpieza de un piso laminado existen productos especiales, ya que estos por su composición no se pueden vitrificar. Existen abrillantadores líquidos de piso laminado que además entregan una película protectora de buena calidad y mejoran el aspecto.

- El piso flotante es recomendado para zonas donde se requiere un mayor confort térmico, como por ejemplo los dormitorios. Se recomienda la utilización de pisos laminados que no tienen la cualidad de absorber el calor de otras superficies.

- Una desventaja es su poca resistencia al derrame de líquidos, ya que estos son absorbidos muy rápido, aumentando su volumen y derivando en la separación de las uniones machihembradas.