Crónica

Así es la doble vida de una brujita chilena

Cuando esta abogada no está vendiendo propiedades, se encuentra dedicando la mayor parte de su tiempo al Tarot y las sanaciones espirituales. Su especialidad, cuenta, es leer la baraja egipcia.

“Nos tocó el año del mono y la torre, por lo que este es un año súper rápido, de harta energía. La torre significa orgullo. El 2016 será un año súper complejo, donde se van a despejar montones de cosas”, predice.

Tiene 59 años, 3 hijos y se separó de su primer marido en el 91. Cuenta que su pasión ha sido el Tarot y el mundo de lo esotérico desde que era una chiquilla.

“A los 5 o 6 años no dormía, me daba miedo, porque a mí me visitaban espíritus. Mi madre me quería llevar al médico, pero mi abuelo, que era judío, se quedaba conmigo y me leía La Torá. Él me enseñó a proyectar cosas, a ver la energía e ir desarrollando la visión. También era un gran lector del Tarot Egipcio y me enseñó a leerlo. Un tiempo lo dejé y luego lo retomé. Me apasiona ayudar a la gente con él. Tengo súper marcada esta doble vida y es lo que más me gusta hacer”.

Vidas pasadas

Dice  que a menudo la gente la mira raro, sobre todo cuando está ejerciendo su profesión.

“Te tratan de brujita -dice- y la verdad es que no es malo que te digan así. La palabra bruja es bonita, en hebreo significa estar conectado con lo divino y lo diabólico”.

Muchos de sus clientes son políticos y empresarios. Rovineth señala que en el mundo de la política y los negocios hay mucha gente que cree en lo esotérico, que toma decisiones en base a la lectura de cartas. Además del Tarot, también hace sanaciones usando la disciplina del Reiki, que consiste en sumir al paciente en viajes astrales. Gran parte de su clientela la contacta para obtener curación física y psíquica.

“Yo veo la salud en el Tarot e incluso las vidas pasadas. Creo que tenemos muchas vidas y tenemos que ir mejorando paso a paso.  La muerte es evolutiva. Creo que somos uno, que somos grupales. Que todos estamos ligados. Que si yo te conozco es por algo. Por ejemplo, en todas las vidas uno se va cruzando con la misma gente.”

Cuenta que varias de sus clientas que no podían embarazarse debido a una menopausia precoz, lograron tener un bebé tras sus sanaciones.

“Vas entregando energía, sacando y limpiando. También hay gente que tiene enferma el alma, que se enferma por sus estados de ánimo. Lo que hago es acostar a la persona y limpiarla poco a poco a través de un viaje astral usando el Reiki. Trabajo con maestros espirituales brasileños. Espíritus que me ayudan a través del proceso”, explica.

También se refiere a la cuestionada credibilidad de los tarotistas.

Chantas y verdaderos

“Hay muchos tarotistas  chantas y verdaderos, como todo en la vida. Yo no soy de las comerciantes. Si veo que alguien no tiene nada, se lo digo. Hay gente que cree que le han hecho mal de ojo, pero en realidad solo son crisis personales, cambios que van atravesando. Sin embargo, hay mucha gente que sí puede sentir cosas que otros no pueden, que son más sensibles que otras, sobre todo los signos de agua (Piscis, Escorpión, Cáncer), que suelen ser más sensoriales”.

Rovineth advierte que existe la magia negra, aunque no le gusta la tendencia de ir viéndole el lado negativo a todo.

“La verdad es que acá en Chile la magia negra, y la magia en general, es básica. Aunque la  mapuche la encuentro fuertísima. Pero las malas cargas te las puede hacer la gente cuando te desea maldad, por egoísimo o envidia”. Respecto a esto, Rovineth es enfática al señalar que ella da consejos para que la gente sepa encontrar sus buenas vibras y limpiarse, pero que no arregla la vida de nadie.

“En teoría, no es que yo haga magia: lo que hago es guiar a la gente. Encausar sus energías. Pero es la propia persona la que debe hacerlo. Yo la voy guiando en este proceso”, finaliza.

Lo último

Lo más leído