Un operativo de la Policía de Investigaciones (PDI) logró la desarticulación de una banda criminal que se dedicaba al tráfico de droga desde Bolivia hasta la Región de Los Ríos. Los delincuentes utilizaban a menores de edad para el traslado, a quienes les adosaban la droga al cuerpo y de esa forma poder evadir los controles policiales, de acuerdo a lo consignado por Biobío.

La operación Dinastía permitió la detención de seis personas, cuatro hombres y dos mujeres, además de la incautación de 10 kilos de cocaína, la cual está avaluada en $150 millones, de haber sido vendida a los consumidores. Esta operación se lleva a cabo gracias a un trabajo en conjunto de la Brigada de Antinarcóticos y Contra el Crimen Organizado y la Fiscalía de Valdivia.

El subprefecto de la PDI, Ginés Cofré, explicó al mismo medio que la forma de operar de los delincuentes consistía en llevar a los menores de edad hasta Iquique, lugar donde se hospedaban en hostales para luego trasladarse hasta Colchane en cercanía de la frontera donde les era entregada la droga. Posterior a esto, viajaban de regreso a Santiago y desde ese punto hasta Valdivia.

Todos los detenidos son de nacionalidad chilena, y quedaron a disposición del Juzgado de Garantía de Valdivia. El líder de la banda contaba con una orden vigente por robo con intimidación, además de un prontuario por tráfico ilícito de drogas y violación a la Ley de Armas.