Fueron solo 47 personas las que tuvieron fe, y un poco de suerte, al inicio de esta Premier League. Fueron 47 personas quienes apostaron porque el Leicester City conseguiría su primera estrella. Fueron 47 personas que ahora están más felices que cualquier otro hincha de los Fox porque además de ver a su equipo campeón, también les llegó platita al bolsillo.

Las casas de apuestas estaban con el poto a dos manos. Un promedio de 6.500 euros pagaba al inicio de la temporada el Leicester si se daba la chance de que el equipo saliera campeón. De las 47 personas que se registraron en Inglaterra apostando por el equipo de Rainieri, 24 aceptaron negociar un premio más bajo para irse a la segura. Los 23 restantes siguieron hasta el final.

Y son esos 23 apostadores que ahora se harán la América pasando por caja para cobrar su premio, el cual tendrá que ser pagado por las distintas casas de apuestas, lo que hace peligrar el jugoso negocio. Se estima que entre los afortunados se repartirán 13 millones de euros. Cualquier morlaco.

"La victoria del Leicester puede ser el mayor desastre en la historia de las apuestas. Sería el peor resultado para nosotros financieramente y el mayor desembolso realizado en pagos", había descaseteado hace un tiempo Alex Donohue, de la casa de apuestas Ladbrokes, con la BBC. Ahora le queda solo pagar.