Ayer por la mañana, las autoridades suspendieron brevemente las labores de búsqueda de Tomás Bravo en tierra.

Así, personal de la PDI, GOPE y brigadistas dejaron sus tareas por unas horas para dar paso a la intervención de la FACh.

Los aviones requerían despejar la zona, de manera de lograr capturar imágenes limpias del área cercana a donde se perdió la pista del menor el miércoles de la semana pasada.

En la misión se recurrió a aviones tripulados y no tripulados capaces de generar imágenes de alta resolución, las que serán procesadas y analizadas hoy en Santiago, con la esperanza de dar con alguna pista del paradero del pequeño.

Continúa la búsqueda de Tomás

El contralmirante Jorge Parga, jefe de la Defensa del Biobío, dijo que las fotografías aéreas buscan "poder determinar qué lugares invitan a incrementar las medidas de rebúsqueda, de acuerdo a los antecedentes que se logren por las distintas imágenes".

"Lo que se puede detectar son imágenes térmicas que pueden indicar la presencia de seres vivos, y eso es tremendamente importante cuando las condiciones geográficas impiden detectar por otros medios", agregó.

El intendente de la Región del Biobío, Patricio Kuhn, resaltó que el clima acompañó durante el sobrevuelo de las aeronaves de la FACh.

"Las características que tiene este sector son muy variadas. Hay sectores boscosos, hay una parte que corresponde a una explotación antigua de bosques, por eso el trabajo de motosierristas fue muy valioso y permitió el acceso de perros al lugar", destacó la autoridad regional.

Kuhn añadió que hasta hoy "no se ha encontrado nada, pero se ha desarrollado un tremendo trabajo y hemos avanzado muchísimo en descartar opciones y lugares, de manera que nos vamos concentrando en lo que todavía nos falta".

Hasta ayer, personal de búsqueda delimitó un radio de ocho kilómetros a la redonda para continuar con la búsqueda de Tomás, que incluye perros adiestrados y una brigada subacuática.