Al final de una nueva mañana de trabajo en el búnker de Juan Pinto Durán, dos de los preseleccionados de Jorge Sampaoli salieron este lunes 5 de mayo cerca del mediodía a enfrentar a los ágiles de la prensa: el colocolino José Pedro Fuanzalida y el celeste Paulo Garcés.

Y fue "Chapita" el que acaparó mayor atención, pues tiene mucha competencia en su puesto, partiendo por el titular Mauricio Isla y siguiendo por quien asoma por los palos, el chileno-sueco Miiko Albornoz.

"Hoy día Chile tiene un lateral derecho clarísimo, que es Mauricio Isla. Uno tiene que ser realista, porque hay jugadores de gran nivel que tienen grandes chances de estar en el Mundial", dijo Fuenzalida, quien agregó que “el cuerpo técnico verá si MiikoAlbornoz puede ser parte de este proceso” y que “creo que puedo aportar en el Mundial, pero la decisión es del entrenador”.

“Chapita” fue sincero y admitió que “el año pasado jamás hubiese pensado que sería parte de la nómina de la selección chilena”.

Luego, el hombre formado en la UC declaró que "el mensaje de Jorge Sampaoli es entregarlo en cada entrenamiento y por eso ahora Chile es un rival difícil, que los otros no quieren enfrentar. Tenemos un gran equipo y nos prepararemos de la mejor forma para jugar con grandes rivales en el Mundial".

Por su parte, Paulo Garcés reconoció que la pelea por un cupo entre los tres arqueros que irán a Brasil es dura, pues sabe que el fijo es Claudio Bravo y que los otros dos espacios los disputa con Johnny Herrera y Cristopher Toselli.

“La lucha es bonita. Es un sueño estar en esta nómina y hace un año no lo creería. Soy realista y sé que quedan dos puestos para tres, pero la pelearé hasta el final”.

Finalmente, ambos jugadores también se refirieron a la lesión que sufre Arturo Vidal, que mañana podría llevar al hombre de la Juventus al quirófano, lo que pone en duda el estado en el que llegaría al Mundial e incluso si puede disputar el certamen. Los dos manifestaron sus deseos de que el tricampeón del Calcio se recupere y sea parte del plantel rojo.