Con el 22% de su cuerpo quemado terminó Américo Aros Garay de 47 años,  chofer de la línea de coletos 153 de la ciudad de Viña del Mar, luego de sufrir la explosión de su bólido en una distribuidora de gas natural.

El pencazo que destruyó por completo el vehículo y lo dejó con parte del cuello, caracho, brazos, manos y pecho quemados se registró la noche del sábado en el sector de Miraflores Alto, cuando el titán terminó de cargar gas y por una falla en la manguera receptora, se produjo una cotota acumulación del fluido en la cabina del vehículo y, al realizar contacto, se ocasionó el estallido.

Conmocionado por el accidente de su taita, Claudio Aros, hijo del chofer quemado, relató que "todos pensamos lo peor, pero gracias a los trabajadores del servicentro que lo asistieron, le salvaron la vida a mi padre".

Por su parte, la capitana Daisy Ferrrada, de la 4a Comisaría de Concón, informó que "lo acontecido es materia de investigación para establecer los causas".

Al lugar también llegó personal de la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC) pa’ olfatear los detalles del guaracazo.

En tanto, el conductor fue trasladado hasta el Hospital Gustavo Fricke de la Ciudad Jardín.