La supuesta censura de Cathy Barriga a la concejala Marcela Silva en el consejo municipal de Maipú sigue dando que hablar. Invitada por el matinal de Canal 13, "Bienvenidos", la representante del PS se fue de lengua y apagó el fuego con bencina, al referirse sobre la gestión de la ex chica Mekano.

"Fue un acto de censura. No fue primera vez en esta sesión, ha ocurrido otras veces, en otras sesiones. Esta vez fue la gota que rebasó el vaso, porque me censuró tres veces", lanzó al toque.

"Nunca he cruzado una palabra con ella (Cathy). He pedido audiencia, me las concedió y me dejó esperando. No me atendió", agregó.

Sobre la frase que gatilló la polémica y que aludía a que la televisión "aguanta mucho", la concejala explicó que al decirla se refería a "las transmisiones vía streaming del consejo municipal. Ella dice que habla con los concejales pero eso no es así (...) yo jamás me referí a su pasado televisivo".

Pa' terminar sus descargos contra la edil, Marcela explicó que "cuando uno manifiesta opiniones contrarias, ella se victimiza y se siente afectada".

MICROFONOGATE

Ante quienes defienden a Cathy Barriga, asegurando que no cuenta con la facultad de apagar o encender micrófonos, la concejala detalló que "ella tiene dos botones. Uno para hablar y el otro para cortarnos".

En relación al descargo de la alcaldesa, quien acusó mala leche de la concejala tras el despido de seis familiares, Marcela Silva desmintió todo. "La situación que ella ha tomado como caballito de batalla, es que la hermana del papá de mis hijas trabajó en el municipio (en períodos anteriores), pero yo no contrato a la gente, es el alcalde el que tiene la facultad", dijo. Sin embargo, minutos después, la concejala reconoció que su pareja es también su asesor en el municipio.