A dos años en tratamiento sicológico financiado por el Sename deberá ser sometido el peque C.P.F., de 6 años, único sobreviviente de la masacre de Quilicura.

El chico se salvó de morir asesinado por su padre, Eduardo Pozas Neira, porque  se encontraba en el segundo piso de la casa de su progenitor, cuando el sujeto disparó contra su mamá, Iris Gricel Formandoy Rivera (33), y de su hermanita, Damaris Marlén (9), y se suicidó.

El niño se había escondido debajo de la cama y fue encontrado en estado de shock por un carabinero.

Angélica Marín, jefa de la unidad de Protección de Derechos del Sename, precisó que el pitufito quedará bajo el cuidado de su abuela materna, Rosa Rivera.

"Lo primero que se buscó son los vínculos y los lazos de cariño, por lo que este menor se irá a vivir con su abuela en  Isla de Maipo, pero recibirá atención profesional de un equipo multidisciplinario de profesionales en Talagante, que es la dependencia más cercana", indicó.

Añadió que el menor todavía no supera el estrés post traumático que le provocó el hecho.

A las 5 de la tarde de ayer fueron sepultados en el Cementerio Parroquial de  Isla de Maipo los restos de Iris y de su hija Damaris. El velorio se realizó en la villa El Gomero de esa comuna.

Jaime Salas T.