El cariño que muchos súbditos de la corona británica sienten por el príncipe Willy y su hermano, Harry, se debe a que los han visto crecer de guaguas.

La exposición pública a la que están expuestos los miembros de la monarquía los agobia, y para que no le suceda lo mismo que a su mamá que se fue al cielo arrancando de los paparazzi, el flamante marido de Kate Middleton le pidió un favor a su abuelita.

Quizás se fue al cerdo, porque el segundo heredero al trono le solicitó a la reina Isabel su aprobación para ausentarse de actos oficiales durante dos años.

Según comentan los allegados del Palacio del Sopaipleto, el príncipe quiere copiar la vida que llevó su abuela después de casarse en 1947 con el duque de Edimburgo. En aquella época Chavela pasó un tiempo con su marido, mientras él servía en Malta en la Marina.

"El príncipe Guillermo y Katherine seguirán el modelo del matrimonio de la reina y el príncipe Felipe. Guillermo quiere que su matrimonio sea sólido antes de entrar en la función pública tras la Boda Real", declaró un funcionario del Palacio de Las Ollas a Presión.

El itinerario de los duques de Cambridge no está claro. Luego de la fiesta en Buckingham junto a los 300 invitados más lolos, los recién casados presumiblemente consumarán su amor en una habitación del lugar.

Fuentes confiables del Palacio del Calzoncillo sapearon que es poco probable que el pelado use los preservativos conmemorativos de su boda y tampoco creen que necesite la cerveza con Viagra que su fabricante le regaló para la ocasión.

La información sobre su luna de miel es escasa, pero, según el Sunday Mirror, la pareja pasará un par de días en Escocia y luego se echará el pollo a Australia para chapotear en la barrera de coral de la isla Lizard, un paraíso terrenal con playas vírgenes y abundante vida marina.

El regreso a Gran Bretaña deberá ocurrir antes de dos semanas, porque ese fue el permiso que el heredero consiguió de la Real Fuerza Aérea, donde es piloto de helicóptero.

La joven pareja está considerando ocupar unas piezas que eran de la princesa Diana en el palacio de Kensington. La mejora será su morada cuando estén en Londres, porque su residencia permanente será una casa de campo que arriendan en Gales, por lo menos hasta que Guillermo siga ligado a la Fuerza Aérea.