Una desalentadora cifra arrojó un estudio realizado por la OCDE, "Educación at a Glance 2017": uno de cada cinco jóvenes chilenos de entre 15 y 24 años no trabaja ni estudia.

Un dato bastante ominoso, teniendo en cuenta que correspondería al 21% de los lolos, lo que deja a Chile seis puntos porcentuales por sobre el promedio de los países de la OCDE y solo superado por Estados Unidos.

Al parecer, uno de los factores tendría relación con las dificultades de entrar a la universidad y el alto endeudamiento de quienes abandonan sus carreras.

"Esta es una cifra alta y se explica desagregando cuál es el estudiante que ingresa a la universidad", comentó María Luisa Muñoz, académica de la Universidad Católica, a Cooperativa.

Y precisó que quienes acceden a la educación superior provienen, en su mayoría, de grupos socioeconómicos medios y altos. Mientras que los que provienen de sectores más desfavorecidos, suelen tenerla más peluda al momento de conseguir trabajo o becas para estudiar.

Ellas son las más desfavorecidas

En el caso de las mujeres, ellas corresponden el 26 por ciento dentro de este mismo rango de edad que no estudia ni trabaja, lo que resulta preocupante.

Desde la OCDE también sapearon que Chile tiene el segundo arancel más caro en educación pública de educación superior, con un promedio de 7.654 dólares: más de 4 palitroques anuales.

El primer país que lidera esta investigación, superando a nuestro país, es Estados Unidos, donde el arancel promedia los 21.189 dólares.