Todos cachamos lo importante que es alimentar sanamente a nuestro cuerpecito, para estar vivarachos en la pega, tener fuerzas pa' realizar deporte y cumplir con las tareas en la casa. Pero, a pesar de esto, igual de repente pegamos la falla y nos saltamos alguna comida por falta de tiempo o por alguna tonta dieta. Obviamente, estas prácticas tienen muy malas consecuencias para la salud y no siempre tienen buenos resultados al perder esos kilitos de más.

Según explica el nutricionista y entrenador personal de Nutratech (www.nutratech.cl), Ítalo Grottini, cuando se salta una comida, "tu cuerpo entra en 'modo ayuno', durante ese ayuno los hidratos de carbono, proteínas y grasas son utilizados para producir energía. Los carbohidratos son la principal fuente de combustible para el cuerpo, seguido por la proteína y luego la grasa. Si esta fase de ayuno continúa, pasa lo siguiente: los depósitos de almacenamiento de glucógeno muscular y el hígado se agotan".

El especialista señala que a medida que los niveles de glucosa bajan, el body busca otras fuentes de combustible, dado que el mate y los nervios prefieren energía de la glucosa, los tejidos de proteínas (músculo) se descomponen, lo cual es pésimo si el objetivo es construirlo.

"También tienen un efecto negativo en los números de insulina, aumentando sus niveles, lo que lleva a una irreversible acumulación de grasa", suelta el nutricionista.

Este proceso negativo para el cuerpo puede causar los siguientes efectos negativos:

- Náuseas

- Fatiga

- Estreñimiento. O si prefiere, problemas pa’ hacer cacuca.

- Baja de la presión arterial.

- Mayor riesgos de enfermedades renales.

- Mal aliento.

- Daño fetal en mujeres embarazadas.

PROBLEMAS DE SALUD

"Hay una cosa que es simple: si te saltas las comidas, junto con la restricción de calorías tendrás antojos, y cuando caes ante esas tentaciones se produce un alza de azúcar en la sangre. ¿Sus consecuencias? Tu cuerpo crea una elevada cantidad de triglicéridos, que a su vez, se convierten en acumulación de grasa, a su vez el glucógeno pobre provoca bajos niveles de energía, porque el azúcar en la sangre no está siendo reemplazada. El resultado de esto es que el peso que se pierde es principalmente agua y músculo", explica el profesional.

LA MEJOR ALTERNATIVA

¿Es importante manyar seguido? Sí. Pero requiere de un esfuerzo adicional. Las investigaciones han demostrado que los compipas que comen cinco a seis comidas al día son capaces de perder más grasa y bajar más de peso que las personas que sólo consumen tres comidas diarias.

"Las comidas frecuentes contrarrestan los efectos negativos del azúcar en la sangre, para realizar la tarea de comer con frecuencia, les aconsejo preparar varias comidas por adelantado, almacenarlas en recipientes refrigerables y microondeables, para tener siempre en el trabajo o viaje", finaliza el musculín.