A las 7:30 de la mañana de ayer, los vecinos de la intersección de calle Camino Real con Amunátegui, en el cerro Recreo de Viña del Mar, despertaron de forma brusca y asustados. Todo debido a las llamas que salían de entre un muro de piedra de no más de 60 centímetros de alto y el cual, por más que Bomberos intentaba apagar, seguía ardiendo.

José Gatica (24), quien se encontraba durmiendo junto a su mujer y el hijo de ésta a pocos metros de las llamas, se despertó muy enrabiado porque alguien llevaba más de media hora colgado al timbre de su casa, ubicada en Amunátegui 1405.

"Me levanté porque tocaban el timbre de forma insistente. ¡De repente salgo y me dicen que todo el pasto de mi casa estaba prendido!", contó sorprendido el viñamarino, quien junto a su familia fueron los únicos en ser evacuados ante la emergencia.

Cuatro compañías de Bomberos, en conjunto con Gasvalpo, combatieron por cerca de dos horas las llamas, las que en un momento alcanzaron los dos metros de altura. Por un momento los efectivos pensaron que la fuga de gas podría llegar a magnitudes insospechadas, tal como la que azotó el casco histórico de Pancho, en 2007.

Cada vez que el fuego aumentaba su fuerza, los efectivos aplicaban espuma al muro ardiente para evitar propagación, debido a la poca distancia que tenía con las viviendas.

La empresa Gasvalpo, al ser consultada por lo ocurrido, sólo se pronunció mediante un comunicado. "Se iniciaron las investigaciones para determinar las causas reales que ocasionaron la emergencia", explicaron en el documento.

La Superintendencia de Electricidad y Combustible comenzó con los sumarios correspondientes para determinar las causas de la emergencia y la fuga del gas.