El fin de semana previo al 11 de septiembre del 2007, Elizabeth Morris pelaba papas en la cocina cuando apareció su pareja, el cabo Cristián Vera, con una fuerte luz blanca de fondo.

El día 12 de septiembre de ese año, el uniformado cayó herido por un impacto de bala que, finalmente, le quitó la vida a las 07.05 de la mañana siguiente.

Hoy, a 4 años de la tragedia que enlutó a la institución verde, la familia del cabo asegura que el mártir no está descansando en el otro mundo.

"Cristián está acá en la casa y no solamente yo lo he visto. Mis hijos lo sienten caminar y a mí se me sienta en la cama, contó Elizabeth, la ex pareja del policía asesinado.

Según la familia, el espíritu de Vera se aparece frecuentemente en la casa y en los sueños, como si nada hubiese pasado.

"Hemos hablado muchas veces. Me dice que no está muerto, que sigue aquí con nosotros y que nos va a cuidar siempre", señaló la mujer.

Según cuentan, el fantasmita del malogrado carabinero no anda por el mundo de los vivos como un espíritu chocarrero, sino más bien como una suerte de protector.

"Es un ángel. Jamás hace cosas malas. Incluso, una vez revolvió el living para que todos se dieran cuenta de que me había quedado dormida con la estufa", recordó Elizabeth.

DEUDAS

El diario pop consultó a Carmen Cancino, una experimentada médium que se comunicó con el carabinero en una visita que realizó junto al cocido mañanero, Bienvenidos de canal 13.

"Él dijo que no se podía ir porque tenía cosas pendientes. Como él nunca se pudo casar con Elizabeth, la quiere ver de blanco y rehaciendo su vida. La quiere ver feliz", aclaró la caperuza del más allá.

El cabo Vera se fue al Cielo, pero su familia tiene clarito que pasa más abajo que arriba para poder estar cerca de ellos.