Diana Huerta (30) fue mamita en el 2004 y ese mismo año comenzó su calvario. De la noche a la mañana, por un cambio hormonal, le salieron pelos donde comúnmente le aparecen a los hombres.

Su pecho y su mentón tuvieron una transformación que la asustó. "Fue muy brusco el cambio y lo peor es que vino de la mano con un tema social porque no me daban trabajo. Me marginé, me escondí en la casa y no quería que nadie me tocara. Tenía ganas de sacarme la cara", soltó al diario pop.

Algo similar le ocurrió a una mujer alemana de 39 años, quien cansada de la depilación, dejó que actuara la naturaleza. Con barba y bigotes se dejó caer hace unos días en el programa británico "This morning", donde contó su drama.

Hirsutismo se llama la enfermedad que las afecta a ambas y que consiste en un exceso de vello de carácter masculino.

Esto tiene dos causas, según Rafael Ríos, endocrinólogo de la Clínica Vespucio. "Puede ser por un exceso de hormonas masculinas o porque el cabello es más sensible a esta hormona".

Nuestra compatriota Diana estuvo 4 años con tratamiento médico y hasta el año pasado aplicó una afeitadora para disimular su pelo facial, máquina que destruía su carita.

Luego decidió entrar al programa "sonrisa de mamá" de Centraláser, lugar especializado en depilación láser, donde fue becada por su enfermedad. Y le cambió la vida. "Ahora ya no me escondo", dijo.

Patricia Berríos, directora Comercial de Centraláser, señaló que el 20% de sus pacientes sufren de hirsutismo.