"Te creís Fittipaldi": dícese del conductor de cuatro ruedas en calles, avenidas, pasajes o carreteras que, sin cachar ni una, gusta de meter la pata a fondo, pelar forros o pasar lo más rápido posible la primera. "RIP": abreviatura de Requiescat in pace; o sea, que el pajarón se fue a descansar en paz. Y todo por dárselas de Fittipaldi.

La frasecita es añosa y ha ido pasando de generación en generación. Y eso que este flaco de Brasil la rompía por allá en los 70. Por eso mismo, no es extraño que las tribus actuales, sin importar el nivel socioeconómico y educacional, guste de lanzar la frase a todo irresponsable que ame la velocidad sin medir potenciales condoros.

Pues bien, nuestro conocido Michael Schumacher, el mismo que ganó siete veces el campeonato de Fórmula 1, se enteró de que a los chilenos buenos para estrangular el acelerador se les llame como el famoso piloto.

Mirando YouTube, al mismo tiempo de que observábamos en internet los cientos de choques de los apurones locales, se nos apareció "Schumi" hablando con un chileno del tema. Es que como somos una raza única, a nadie, pero a nadie más en el mundo se le ha ocurrido decirle Fittipaldi a un loco al volante, de esos que prenden cuando les dicen "Gallina", como el gran Marty McFly, de "Volver al Futuro".

“Hola, Michael, vengo a compartir una anécdota contigo de donde yo vengo, Chile... A los conductores que manejan rápido se les suele llamar conductores de Fórmula Uno, hasta el punto de que son comparados con Fittipaldi o, incluso, son llamados Schumacher”, lanzó el gallo, mientras el astro miraba con cara de “qué gua” y cerraba, por suerte, con una sonrisa...

Y no le gustó nada al alemán. Es que captó de una que eso de creerse rápido es más tonto que confundir la creación de un Ministerio de Deportes con una Ley Anticapuchas.

Sacando la quisca verbal, don “Schumi”, quien sí respeta los límites de velocidad en ciudad, aclaró que “no deberías mezclar pistas de carrera y caminos normales. Ir rápido en caminos normales, honestamente, es estúpido, peligroso y sin sentido”.

De pasadita, mandó a todos los chilenos que se creen cancheros en las arterias a "ir a una verdadera pista y descubrir cuáles son tus habilidades". Y nos patea con una advertencia: "Respeta los límites de velocidad, eso hago yo". Y si lo dice él... Eeella, la Schumacher.