Desde esta semana, la WWE tirará al ring a 32 de los mejores luchadores del mundo en "peso crucero", no más de 203 libras o 93 kilos si la pesa es chilena, y por primera vez un compatriota estará peleando a ese nivel.

Se trata de Alejandro Sáez, un diseñador gráfico de Santiago, que hace 14 años que se dedica a la lucha libre en distintas ligas nacionales donde es conocido como el "Mostro" o el "XL", por su gran corpulencia.

Sáez se fue hace algunas semanas a Estados Unidos para preparase en los centros especializados del gigante del entretenimiento WWE y ya participó en la presentación de la "CWC", cocido que se comienza a emitir por la "WWE Network" desde este miércoles 13 de julio.

"Lo que estoy viviendo es un sueño hecho realidad. Yo empecé hace muchos años en esto y como chileno la WWE es algo muy lejano, pero hoy estoy aquí. Puedo decir que es como cuando Chile volvió a un Mundial del Fútbol después de mucho tiempo", soltó Alejandro, que se confesó en una exclusiva mundial con LaCuarta.com.

- ¿Qué ha sido lo más impresionante de ser uno de los 32 luchadores que van por el título mundial de peso crucero?

- Creo que el tipo de luchadores que hay. Son muy buenos. Y creo que lo más difícil para mi fue llegar al peso. Y no es para menos si yo pesaba 110 kilos y ahora llegué a los 93. Imagina que bajé mucho pero igual estoy volando como siempre. Yo me declaro un luchador del aire.

- Todo vale para poder cumplir lo sueños...

- Sí, claro. Yo la verdad estoy extasiado con este mundo tan fantástico. Y espero poder abrirle puertas a otros luchadores nacionales para que puedan llegar a WWE. A mi personalmente me gustaría seguir participando a este nivel.

- ¿Conociste a alguna superestrella? De esas que vuelven locos a los fans chilenos de la lucha libre profesional...

- Uff, a muchos. Es que entrené donde ellos también lo hacen. Quizás el que más me impresionó fue Triple H. Fue increíble compartir con él. Otro sueño más cumplido.

- Más allá del resultado en la el título "CWC" ¿Qué se viene para tu futuro?

- Renunciaré a mi trabajo como diseñador en Chile y seré luchador de tiempo completo. Hay que hacer ciertos sacrificios para ser un profesional.