Por agilados, choros al ope y pokemones, que es lo peor de todo, cayeron los supuestos cinco implicados en la riña y posterior muerte del joven Rodrigo Norambuena Vásquez (18), el pasado 15 de diciembre, en la playa Acapulco de Viña del Mar.

El joven agonizó por siete días, lo que motivó intensas diligencias de la Brigada de Homicidios de Valparaíso, quienes, en conjunto con los ágiles del Cibercrimen de Investigaciones, lograron individualizar a los pokeasesinos a través de sus correos electrónicos y fotologs.

CUMAS

La zarza de chorongos pasados a leche no halló nada mejor que escribir comentarios relativos al asesinato que se habían mandado y se sentían de lo más famosos porque llenaban con tinta negra las páginas de crónica roja del país.

"La detención se logró a través de declaraciones de testigos y del seguimiento digital a sus correos y fotologs. Se logró la individualización de los sujetos que por medio de internet se jactaron de participar en la riña y haber agredido al joven", explicó José Carrasco, jefe de la BH de Valparaíso.

AUTOR

Luego de allanamientos de madrugada a siete viviendas de Villa Alemana y Quilpué se logró detener a los cinco individuos.

Todos los pokemones estaban durmiendo la caña y los polis los pescaron apenas con un par de pilchas puestas.

Uno de ellos era el autor material de los 15 golpes que recibió Rodrigo Norambuena, con un palo que sacaron de uno de los escaños de la playa.

"En los fotologs uno de ellos escribió que él lo había rematado en el suelo", agregó Carrasco.

Se trata de Alberto David Quiroga (20), conocido en el mundo de los choros como "El Beto", quien ya tenía antecedentes por robo.

Fue formalizado por homicidio y quedó con canela preventiva.

Los otros detenidos son William Álex Rodríguez Delgadillo (18), Felipe Fernández Campos (19) y los menores F.F.C. Y D.D.M. (16), conocido como DJ Robo. Todos fueron formalizados por choreo con violencia y se les dictó firma semanal y la prohibición de acercarse a la familia de la víctima.

AYUDA

Leonardo Norambuena, hermano del asesinado Rodrigo, dijo que junto a sus familiares contribuyeron a la detención de los pokemones.

"Vimos que en los fotologs se jactaban del crimen, que habían salido en el diario y que los estaban buscando porque habían dejado la grande. Uno salía hasta con pistolas, así que copiamos la información y la entregamos a la policía", relató Leonardo, quien no quedó conforme con las medidas cautelares, porque quería prisión preventiva para todos los detenidos.

C. Argandoña/R. García