En Curicó, Lautaro está con sus boleadoras todas machucadas por culpa de unos vándalos sin respeto.

Cache que en la Plaza de Armas de la ciudad de la Región del Maule, existe un monumento al líder mapuche tallado en madera y al pobre lo tienen de casero los malandras.

Sucede que en menos de dos años le robaron de su mano su robusta y filuda lanza ¡12 veces!

Pa' más remate juran que es banderín y para cada celebración futbolera los hinchas peloteros colocan banderas del Colo, la "U" y Curicó Unido en la mano que tiene el hoyito para poner el arma.

“Si es normal que hagan eso en cada festejo, ya es como una costumbre. También se suben arriba y la dañan. Se sacan fotografías, hacen lo que quieren con él”, reveló una persona de la municipalidad, que prefirió el anonimato.

El toqui está más jodido que Caupolicán antes de morir y según nos sapeó Juan González, dire de Aseo y Ornato de la Municipalidad de Curicó, estos choreos no tienen para cuando acabar: "Estamos aburridos. Lo hacen en la noche o los fines de semana. Anda harto vándalo. No solo rompen la lanza, también sus extremidades".

El pobre toqui, que fue erigido en Curicó, porque murió en la VII Región, ha debido recibir una manito de gato en su muñeca, torso, pies y boleadoras, producto del daño que le han hecho los antisociales.

Reparar la gracia sale salado. Hace dos meses que están haciendo una réplica: "No es llegar y hacer una, tiene que ser similar a la original", soltó.

Sin respeto

La obra realizada por Heraclio Calquín, que se demoró dos meses en terminar la estatua, es un imán para los amantes de los grafitis. Y, según nos contaron, entre sus obras gramaticales no falta el típico y ordinario p... pa'l que lee.

Para evitar que esas cochinadas se vuelvan a repetir, González aseguró que ahora usan una laca repelente. “Siempre estamos preocupados de su conservación. Es parte del programa de Conservación de Monumentos”, señaló.

Para el curicano Florcita Motuda el atado es porque los lolos no están ni ahí con la historia.

“Es un juego de niños. Eso prueba que los héroes de las guerras están dejando de ser referencias”, afirmó.

Vendimia

Con la celebración de la Vendimia, se pensó que Lautaro nuevamente correría peligro, pero está vez se salvó jabonado.

“Por suerte no pasó nada. Ojalá la gente tomara conciencia del problema y nos ayudara a proteger este monumento”, dijo González.