Moverse en bicicleta para llegar al trabajo es un ejercicio muy habitual en el mundo, y positivo para el que lo hace y su entorno, pues es saludable y, de paso, ayuda a descongestionar las calles y limpiar el ambiente. Claro que en nuestro país llegar a la pega pedaleando es poco practicado: sólo el 3% de los chilenos lo realiza, según un estudio de Laborum.com.

Pero no todo está perdido, pues en esta encuesta se llegó a la conclusión de que las personas tienen en mente esta salida. Incluso, un 50% aseguró que felices pedalearían hasta sus trabajos, claro que aquí está la piedra de tope: siempre y cuando sus empresas les den un incentivo, o al menos un lugar tranquilo donde asearse y cambiarse de ropa.

Según María Jesús García-Huidobro, gerenta de marketing de Laborum.com, estas cifras demuestran que las empresas deberían fomentar el uso de bicicletas en sus empleados. "Es importante que las empresas tengan espacios adecuados para que los colaboradores puedan guardar su bicicleta en forma segura", apunta.

Sin embargo, la realidad es otra, ya que sólo un 5% de afirma que su empresa cuenta con estacionamiento para bicicletas y, de ellos, el 3% apenas la usa para transportarse hasta su lugar de labores. Esta tendencia se presenta también en la Región Metropolitana, y eso que la capital cuenta con 346 kilómetros de ciclovías en 33 comunas, de acuerdo a datos de Mapcity.

Según García-Huidobro, esto ayudaría a minimizar los tiempos de traslado, lo que se transformaría en un ahorro de reloj importante. "Esto disminuiría los retrasos en la llegada de las personas a su empleo y podría aumentar así el tiempo libre. Además, usar la bicicleta ayuda al ahorro económico y a realizar actividad física diariamente", explica.

Con casco

Francisco del Río es amante de las dos ruedas y de pedalear un buen trecho sin agotarse. Dichoso se iría hasta su pega en su bici, pero justamente las complejas condiciones para estar cómodo en su trabajo después del esfuerzo físico, son los factores que lo obligan a dejar el casco en casa.

"Vivo cerca de Pedro de Valdivia y trabajo en Rosario Norte, en Las Condes, así que estimo que me demoraría cerca de 20 minutos. Pero de verdad que hacer trabajo de oficina, con el sudor y todo lo que implica, sería bastante molesto", admite el joven trabajador, quien puntualiza que "si ponen un lugar donde cambiarme, sería genial". ¿En qué estarán topando las empresas para dar esta chance a su personal?

La interrogante es válida, sobre todo si se toma en consideración que, según la Organización Mundial de la Salud, trasladarse pedaleando al trabajo regularmente mejora el estado muscular y cardiorrespiratorio, reduce el riesgo de hipertensión, cardiopatía coronaria, de accidente cerebrovascular, diabetes, diferentes tipos de cáncer (como el cáncer de mama y el de colon), depresión y ayuda al control de peso.