Más de 3 mil estudiantes secundarios de Santiago se aburrieron de los logaritmos y de los análisis sintácticos y se juntaron en Plaza Italia para iniciar una marcha que no estaba autorizada por la intendencia.

Situación similar se vivió en Valparaíso, donde casi 4 mil escolares llegaron hasta el Congreso Nacional para exigir respuesta a sus demandas.

Los pingüinos capitalinos se trasladaron hacia el Parque Forestal, pero como ya es una pésima costumbre, hubo incidentes entre un grupo de escolares y Carabineros en plena Plaza Italia.

Luego el foco de incidentes se trasladó unas cuadras hacia el oriente, lo que provocó un taco de proporciones.

El saldo total fue de 27 estudiantes secundarios detenidos.

Entre las peticiones de los pingüinos, se cuentan el fortalecimiento de la educación pública por parte del Estado y la gratuidad del pase escolar.

Los estudiantes universitarios también chantaron los lápices y se fueron hasta el edificio del ministerio de Educación a entregarle una carta con sus peticiones al ministro Joaquín Lavín.

La presidenta de la FECH, Camila Vallejo, dijo que "estamos pidiendo mayor financiamiento de las instituciones del Estado, mayor democratización y un acceso con equidad y calidad para las instituciones públicas.

La dirigente además dijo que la carta es un ultimátum para el ministro Lavín para que dé respuesta a sus demandas antes del 1 de junio, día para el cual la Confederación de Estudiantes Universitarios (CONFECH) llamó a un paro nacional de la Educación.

Lavín contestó al toque ante la entrega de la misiva.

"Quiero decirles que cuenten conmigo para conversar. Como Ministerio de Educación tenemos una agenda que estamos planteando a los rectores, pero también queremos escuchar los planteamientos de ustedes y de los miembros de la Confech", verseó el guaripola.