Hasta balazos se escucharon en el encontrón que ayer en la madrugada protagonizaron funcionarios de Carabineros y la policía civil, en la población Los Copihues.

El boche se produjo pasada la medianoche, mientras detectives de la Brigada de Investigación Criminal de La Florida realizaban controles de identidad en calle Chacón Zamora.

Durante los chequeos a posibles sospechosos, los detectives hicieron parar a un automovilista que manejaba de lado a lado, métale cunetazos, pero el conductor no se detuvo y los policías lo salieron persiguiendo.

En la huida, el chofer le pegó un raspón en la pierna derecha a la subcomisario de la PDI Alejandra Marchant.

Vecinos del sector dijeron a La Cuarta que escucharon varios balazos.

Tras una persecución como las que salen en la tele, los detectives lograron interceptar el vehículo y detuvieron al chofer.

El conductor resultó ser un funcionario de Carabineros, el cual andaba de civil y con la terrible cara de juguete.

Se trata del carabinero Carlos Eduardo Rojas Carrasco, de 24 años, quien pertenece a la subcomisaría Pablo Silva Pizarro.

FISCAL

El fiscal Paul Martinson informó que el uniformado "manejaba zigzagueando, en forma imprudente y bajo la influencia del alcohol".

Prueba de lo anterior es que el carabinero Rojas sopló el tufómetro y el dragón dejó al descubierto que tenía 0,81 gramos de copete en la sangre.

En la mañana de ayer el funcionario de Carabineros fue presentado en el 14º Juzgado de Garantía, donde el fiscal le formuló cargos por manejar bajo la influencia del alcohol.

El uniformado también fue formalizado por maltrato de obra a funcionarios de Investigaciones, ya que en su escapada le pegó un topón a la subcomisario Marchant.

El juez Patricio Souza dejó en libertad al carabinero Rojas, pero con arraigo y la obligación de ir a firmar una vez al mes a la 36a Comisaría de La Florida.

El carabinero señaló que nunca se percató que los terrícolas que lo hicieron parar eran detectives.

Sin embargo, el jefe nacional de Asuntos Públicos de la PDI, subprefecto Pedro Cuevas, dijo que "ellos (los detectives) sí estaban con sus casaquillas y sus identificaciones, tal como corresponde en estos procedimientos".

El alto oficial confirmó que los policías realizaban controles de identidad "cuando un auto que iba a ser controlado se dio a la fuga y sucede lo que ustedes saben. No existen contradicciones respecto de esta situación por parte de la PDI".

En Carabineros, el comandante Mario Rozas informó que la institución dio curso a una investigación administrativa "para determinar el grado de responsabilidad" del uniformado. Mientras tanto, señaló, mantiene la pega.

El segundo jefe del Departamento de Comunicaciones agregó que el condoro de antenoche "es un hecho muy puntual, casi marginal, que no opaca las buenas relaciones con la PDI".