"El 31 de enero pasado manifesté a través de una carta pública que como cualquier ciudadano afrontaría el escrutinio de mis actos como parlamentario, como ministro de Estado y como dirigente de la UDI. Durante las últimas semanas he estado dedicado a reconstruir el itinerario de mis funciones como senador y ministro de Estado para recopilar los antecedentes que me permitan demostrar en la investigación en curso un aspecto que para mí es esencial para vivir con dignidad y la frente en alto. Soy un hombre honesto, tengo la profunda convicción de que con la ayuda de Dios lograré hacerlo, a pesar de la impresionante y abrumadora descalificación publica que ya me sitúa como condenado sin que haya aún ninguna acusación formal en mi contra", comenzó Pablo Longueira su conferencia de prensa pasadas las 16:00 en la sede de la UDI en calle Suecia, en Santiago.

Durante cerca de 10 minutos, el fundador del partido se defendió, pero jamás mencionó ni su relación con Patricio Contesse, ni el párrafo que aparece en un correo que envió el ex gerente general de SQM al ex candidato presidencia y que aparece en la Ley de Royalty, con la cual, según dijo, no se benefició a ninguna empresa en particular y se recaudaron más impuestos.

Lo que sí aclaró sobre el tema es que "todos los parlamentarios recogimos opiniones, aunamos voluntades, aprobamos una ley que contó con el apoyo prácticamente unánime del Senado (...) fue revisada, discutida exhaustivamente y después aprobada", añadió el ex senador.

Al final de su declaración, que no permitió preguntas, anunció que renunciaba a la UDI hasta que los tribunales de justicia le den la razón y lo declaren inocente.