El pasado 16 de febrero la Confederación Nacional del Transporte Mayor y Menor (Confenared) anunció una paralización del servicio de buses que unen gran parte de la región Metropolitana. La fecha elegida fue el lunes 4 de marzo, fecha clave por el regreso masivo de veraneantes a Santiago y el comienzo de un nuevo año escolar.

La historia en una línea

El “súper lunes” 4 de marzo se anunció un paro de micros del sistema Red.

De qué estamos hablando

La Confenared denuncia malos tratos laborales, además de falta de condiciones de higiene y seguridad por parte de algunas empresas operadoras. Además, acusan a Paola Tapia, directora del Directorio de Transporte Público Metropolitano (DTPM) de cerrar unilateralmente la mesa de diálogo, cosa que desde la entidad de gobierno descartan.

Lo nuevo

- Desde el DTPM aseguran que el paro no afectará “totalmente” el sistema -como se había anunciado en un principio- debido a que el “diálogo está abierto con todos ellos” y se espera destrabar el conflicto.

- Existe un conflicto entre sindicatos: varios trabajadores acusaron a Luis Campos, dirigente de Confanared, de usar este “paro fantasma” con el objetivo de beneficiar a las empresas operadores usando sus demandas como instrumento para conseguir otros intereses, además de no sentirse representados en aquellas negociaciones.

- Campos insiste que el diálogo con el ejecutivo está “cortado” y varios buses han exhibido rayados con la consigna “Paola Tapia, el paro va”.

- Habrá una reunión este jueves 29 de febrero en el Ministerio de Transportes con el fin de llegar a un acuerdo y evitar una movilización que cada día pierde más fuerza.

- Si no hay acuerdo, la  directora del DTP la entidad dice que la adhesión a la manifestación sería de un porcentaje “que no supera el 30%”, por lo que no se vería afectado el funcionamiento del sistema.

Por qué nos debería importar

El lunes 4 de marzo es una fecha clave para el funcionamiento de Santiago, pues se retorna casi en un 100% la actividad tras el fin de las vacaciones y la vuelta a clases.

La paralización y su impacto en la gran mayoría de la población de la región Metropolitana podría abrir un nuevo flanco para el gobierno.

Tres operadores del sistema de buses Red (ex Transantiago) presentan “déficit operacionales”, lo que significa que no alcanzan a cubrir sus gastos con sus ingresos.

Durante los próximos meses, los operadores en déficit podrían pedir su “reorganización judicial” y se están asesorando con abogados expertos en banca rota.

En 2023, el Estado subsidió al sistema de transporte Red con $987.821 millones, la cifra más alta desde su creación. Acusan alta evasión, menor demanda de pasajeros tras la pandemia y la creación de nuevas líneas de metro, que aumentan el costo operativo.