El Presidente Sebastián Piñera dijo ayer que no "comparte" el ataque personal de Jair Bolsonaro a Michelle Bachelet, pero le exigió a ésta mayor fundamento en sus críticas a la situación de los derechos humanos en Brasil.

Bolsonaro se fue con todo contra la ex mandataria chilena, quien en una confererencia  denunciara una  "reducción del espacio democrático" en Brasil en los últimos meses.

La acusó de defender a "vagabundos" e incluso la atacó en lo personal: "Si no fuera por el personal de (Augusto) Pinochet, que derrotó a la izquierda en 1973, entre ellos a su padre (Alberto), hoy Chile sería una Cuba".

"No comparto en absoluto la alusión hecha por el presidente Bolsonaro respecto a una ex Presidenta de Chile y, especialmente, en un tema tan doloroso como la muerte de su padre", dijo Piñera.

Sin embargo, añadió q que "las declaraciones emitidas por la alta comisionada deben ser debidamente justificadas con los antecedentes y la evidencia que corresponde, las que no fueron públicamente acompañadas en esta ocasión".

El Mandatario agregó que "toda persona tiene derecho a tener su propio juicio histórico sobre los Gobiernos que tuvimos en Chile en la década de los 70 y los 80".

Lula. El  expresidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva,  también se metió y expresó su solidaridad hacia la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de Naciones Unidas.

A través de su cuenta de Twitter, el líder del PT señaló que el presidente de Brasil "no se cansa de vomitar ignorancia y avergonzar a Brasil frente al mundo" y pidió disculpas a Bachelet y al "pueblo chileno que hoy tiene el recuerdo de sus muertos y desaparecidos violados por este señor".