La lluvia caída hace dos fines de semana en Chago City revivió el problema que viven cada invierno quienes viven o trabajan en el sector de calle Ecuador con Isla Decepción, en Lo Prado.

Claro, porque allí se forma una "laguna" en lo que antes era un estacionamiento y que hoy, ya fuera de uso, se ha transformado en una verdadera molestia.

Así lo atestigua la señora María, quien se gana los porotos en un boliche ubicado a un par de metros de la "piscina" y que pitea porque el drama no sólo es la humedad del lugar, sino, sobre todo, que no existe un ducto para que escurra el agua, por lo que ésta se empoza y genera mal olor y atrae a zancudos y otros bichos.

"Cuando llueve esto se llena de agua y sólo cuando el calor la evapora se seca", le cuenta de entradita a Yeims Pop.

Y si bien reconoce que hace unos meses fueron de la Muni a ver el problema, el arreglo que se hizo no fue para nada el mejor, porque "perforaron un hoyo en la berma para que saliera el agua, pero en una parte que no sirve, porque el lugar tiene una inclinación y el trabajo fue hecho en la parte de más arriba, así que el agua no se va nunca", recalca.

La esforzada mujer dijo entender que no se podía realizar un forado en la parte más baja, "porque por debajo de la vereda pasan unos cables que corresponden al Metro", pero no entiende por qué no se buscó una solución más razonable.

Una solución que ella tiene clarita: "Lo único que se puede hacer para terminar con este problema es rellenar todo el lugar, o al menos la parte más baja para que la inclinación sirva para que el agua se vaya por el ducto que crearon".

Si bien durante la primavera y el verano el problema no suele ser tan grave, otra cosa es en otoño e invierno, porque el agua desborda los límites de la "laguna" y convierte las veredas en verdaderos ríos.

Y aquello no sólo representa un problema para su boliche, sino también para los peatones que no son del barrio y que piensan que van por la vereda hasta que meten la patuleca en la "piscina".

"En los años que llevo acá son varios los que se han sacado la mugre porque después de una lluvia fuerte no se sabe dónde termina la vereda", le relata al Agente 004.

Por último, expresa su esperanza de que no llueva otra vez antes del invierno, "porque entre el mal olor que se forma y los mosquitos que llegan, ya no queremos más".