En su palecete de La Pintana, Nelson Huenchecal Maliqueo (35) prepara uno de los manjares más deliciosos de la comida italiana, pero con enjundia mapuche: Pizza con piñones.

Nelson es chef internacional y el creador de "Vierzo Delicias", una empresa de comida rápida. Ahí cocina de todo. Pastas, sánguches, platos caseros y las pizzas étnicas. Todas llevan el fruto base de la dieta mapuche: el pehuén.

"Siempre les doy un toquecito mapuche a mis preparaciones. Mi misión es incorporar las costumbres de la gente de la tierra en el mundo urbano", contó el cocinero.

Nelson llegó al negocio de manera accidental hace doce años. Cuando salió de cuarto medio, el sueño de este chef era estudiar arquitectura, pero tuvo problemas de chauchas y no pudo hacerlo.

No tenía muchas cosas que hacer, así que se puso a realizar cursos de cocina para matar el tiempo. Luego trabajó en un supermercado haciendo platos preparados.

"Preparaba sandwiches y pizzas. Ahí me di cuenta que le pegaba a esto", recordó el toqui de la gastromía mapudungún.

Activo miembro de comunidades mapuches, Nelson cachó de sus papás la cultura de la gente de la tierra.

"La cultura mapuche es algo que está cada vez más olvidado en nuestra sociedad. Quiero evitar eso", dijo orgulloso el pizzero.

El secreto de Nelson para sus pizzas consiste en dejar la masa de harina de piñón lista para reposar durante una hora. Ahí recién se le pueden poner los ingredientes y llevar al horno durante ocho minutos.

Según los que saben, la preparación con piñones levanta hasta un muerto porque es muy afrodisiaca.

"La diferencia queda en el sabor, pues el piñón le da a la masa un toque galletoso, consistente y demasiado agradable para todos los paladares", reveló el gastrónomo al que sólo le falta incorporarle un trapelacucha a sus recetas para ser 100% mapuches.

VISIONARIO

El visionario de La Pintana tiene planes a futuro para su negocio.

Quiere instalarse con un restaurante intercultural que sirva los mejores manjares de la cocina mapuche.

"No sólo será banquetería indígena, si no que también una carta en mapudung. Toda la cultura estará impregnada de forma potente en el lugar", dijo el soñador que espera instalarse luego con una picadita de comida peñi.