El 22 de abril de 1992 Martín Cárcamo caminó más que Kung Fu, quedó rojo como jaiba e hizo tantas preguntas como el "El Encuestador" de El Club de la Comedia.

En esa época, al ahora animador del programa Bienvenidos lo calzaron en el cole para realizar el Censo, justito cuando cursaba Cuarto Medio y dejó las patitas en las calles de Concón, en la Región de Valpo.

Este año no participó el conductor de tevé, pero sí lo hacen más de 14.000 censistas que pondrán el hombro hasta el 30 de junio. Los titanes recorrerán todas las viviendas del país tocando puertas desde las 9.00 hasta las 21.00 horas.

Ayer, durante el vamos oficial al Censo 2012, el ex encuestador se acordó de sus peripecias de hace veinte años.

Nos contó que con su uniforme escolar le tocó levantar información en cuatro cuadras y que perdió la cuenta a cuánta gente entrevistó ese día.

"Fue una actividad del colegio. En ese minuto nos pusieron un siete en Historia por ir al Censo, era la motivación para hacerlo", reveló.

El rubio natural de la tevé criolla contó que estuvo estudiando una semana una carpeta que le entregó el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), organismo a cargo de la medición, pa' quedar perito a la hora de hacer las preguntas.

"En esa época no era profesional o remunerado y nos dieron un cocaví, que era un sándwich con un queque y un jugo", soltó el animador.

Esa mañana, Cárcamo salió a las 8.30 horas y se juntó con un compañero del cole. No usó un peto azul ni portó una tarjeta de identificación con su foto, nombre y número de carné, como se estila ahora.

POCHITO

No alcanzó a sentarse en el sillón de ninguna casa cuando ya le estaban ofreciendo algún pancito para aguantar el día. ¡Terminó pochito!

"A lugar que iba, la gente me daba un sándwich, un jugo o una bebida. Comí mucho ese día, lo bueno es que era flaquito", aseguró.

Martín recordó que "en ese entonces no trabaja en la tele. No me conocía nadie y me di cuenta de que la gente es muy generosa".

Igual no más pasó malos ratos, ya que varios potenciales encuestados no lo pescaron ni en bajada y ni siquiera le abrían la puerta.

"Me acuerdo que no me pescaron como en cinco casas", dijo el partner de Tonka Tomicic.

El animador contó cuál era su sueño adolescente y su verdadera motivación para ponerle ñeque al Censo: "Todos teníamos el sueño de que nos abriera alguna mina, pero la verdad me tocaron puras señoras. Claro que por lo menos comimos rico".

CONSEJOS

Con la experiencia que tiene un soldado después de una batalla, Cárcamo soltó algunos consejitos para que los censistas aguanten bien en su laburo.

"Les aconsejaría que lleven protector solar, un factor 50 si es necesario. Yo me quemé mucho, terminé como jaiba. Hay que llevar harta agüita, su buen cocaví por si le toca gente amarrete. Y la idea es andar bien perfumado por si salta la liebre".

EMA COMIÓ HASTA TOSTADAS EN PALACETE DE PIÑERA

La primera encuestadora del Censo fue Ema Barros. La trabajadora llegó hasta el propio palacete del Presidente Sebastián Piñera, en Las Condes, y le sacó punta al lápiz pa' llenar el formulario del dueño de casa.

La censista es toda una profesional y sólo contó que el mandatario y la Primera Dama, Cecilia Morel, le sirvieron desayuno en los veinte minutos que duró la entrevista. "Comimos unas tostaditas mientras le hacía las preguntas", reveló la encuestadora.

Don Tatán soltó luego de ser censado que "los chilenos somos como una gran familia y Chile es nuestro gran hogar, por eso es tan importante el censo".