“Le paré los carros y en eso que me voy a abalanzar, me cegué. Alguien me pegó un botellazo... pegué una certera puñalá a alguien que salió de la nada que se metió en el medio... Salió corriendo igual que yo. Llegué a casa y él no... Murió”.

El relato no corresponde a una de las crónicas policiales que a diario publicamos en La Cuarta. Tampoco sabemos si es real o no. Se trata de una de las crudas historias que aparecen en "Reo Cronic", revista escrita, editada y publicada por los mismos preciosos de la Peni.

En la publicación, de corte mensual, los internos del Centro de Detención Penal Santiago Uno (la ex Peni) desarrollan su talento literario en descarnadas crónicas y cuentos cargados de coa humor negro y sangre. Como la historia de un choro canero que se enterró una aguja y debió salir del penal por ayuda. O la de un perico que tras el apuro por hacer pipí terminó rociando a otro reo que se encontraba haciendo sus necesidades biológicas.

“El lenguaje que se utiliza quizás no es común al de las personas, pero a quienes conviven dentro de una cárcel le es más entendible y fácil de comprender”, explica Gabriel Sotoconil, uno de los fundadores del proyecto.

Sotoconil relata que lo que más les cuesta es encontrar un computador y una impresora para publicar. Sin embargo, cuando sale uno de los números de “Reo Cronic” su satisfacción es enorme.

“A muchos no les interesa la cárcel. He aquí una pincelada que ahorra la explicación de contarle a un amigo como se sobrevive en la cárcel”, agrega Gabito, que está adentro por estafa, pero que quiere postular este año a algún beneficio.

“Reo Cronic” es una guía que trae palabras del más puro coa usado dentro de la cana (ver recuadro), además de un set de preguntas que se hicieron durante el “censo canero” y que van desde “¿es pica’o a choro?” hasta “¿ha metido la cabeza al guáter?”.

“Si esto llega a su manos le pedimos por favor que lo lea y haga copias”, dice Gabo a los que tengan el placer de pillarse con la publicación.

Amallao: salirse del juego sorpresivamente cuando se está ganando.

Andar de escupo: acto delictual en el cual se mancha con saliva a una persona, para luego simular limpiarla y robarle.

Balurdo: delito de engaño con un aparente fajo de billetes.

Barretín: mentira. Persona que miente. Falso. Persona carcelaria.

Bía: golpiza.

Braca: estar desconfiando de situaciones, personas o cosas. Estar alerta y a la defensiva.

Biombo: estómago.

Achavao: persona que ha confesado su delito

Boca Negra: escopeta, revolver.

Al paso: sustraer caminando especie o dinero a una persona de camino al metro o al trabajo.

Baboso: estúpido.

Andar con el medio globo: no confundir con llevar preservativos.  Es estar ansioso por enterarse de algo.

Atacar rancho: ir en busca de la comida que da el personal al interior de la cana.

Andar de mano: lanza escapero que roba dinero y luego huye.

Andar de gancho: hurtar con los dedos.