Para el nuevo alcalde electo de Conchalí, Rubén Malvoa (31), no existe ninguna duda: Su hijita Laura de tres meses  llegó con la marraqueta bajo del brazo.

El joven abogado y militante de Renovación Nacional obtuvo las llaves del municipio con un 43,32% y aunque bromea con que su retoñito le trajo la suerte, también está convencido de que su triunfo se lo debe a que dialogó cara a cara con sus vecinos "para conocer los reales problemas de la comuna".

Malvoa, que doblegó al alcalde PPD Carlos Sottolichio, está tan chocho con su hijita que no la pierde de vista. Él y su pareja, la diputada de RN Karla Rubilar (31), con la que pronto contraerán nupcias apenas ella termine sus trámites de divorcio, realizaban el puerta a puerta siempre acompañados de su bebé. "Yo valoro la carrera política, pero tengo claro que la familia es lo más importante que existe. Yo me debo a ellos y aprovecho cada momento para compartir en familia", infló el pecho.

Karla Rubilar confidenció que su pareja no tiene ningún empacho en atender al nenuco: "El gordo la hace dormir, la baña en la noches y hasta le cambia los pañales. Además siempre cocina, arregla el jardín y construyó hasta nuestro quincho", reveló la parlamentaria.

La pareja lleva cerca de tres años. Se conocieron en el partido y desde entonces nunca más se han separado. "Él me ayudó en mi campaña para ser diputada. Ahora estamos esperando casarnos luego. Aunque no nos quita el sueño, porque somos una gran familia", dijo Rubilar.

Luego de mudar a Laurita y asistir a su mujer mientras daba pecho al bebé en plena sede, Malvoa habla de sus proyectos para el municipio. "Yo quiero que Conchalí crezca como las comunas aledañas, Renca, Recoleta, Huechuraba. Voy a gestionar para tener Sapu las 24 horas, mejorar el deporte y atender como se merece a la tercera edad. También distribuiré la píldora del día después".