Un nuevo lomo de toro en su investigación tendrá que sortear el fiscal de Chillán, Pablo Fritz, luego que uno de los 13 cabritos que habrían participado en el apaleo al joven scout viñamarino Juan Andrés Bagnara (18), durante un rito de "iniciación", salió del país rumbo a Colombia.

La "totemización", cocinada por la agrupación Stella Maris, con un surtido de chuletas, cachamales, mangazos y hasta con una marcación a fuego en las nalgas de Bagnara, se realizó el 8 de enero en las cercanías de la capital de las longas.

A las 8.30 de la mañana de ayer partió a Bogotá, capital cafetera, Raúl Verdugo Marchese (22), quien no tenía medidas cautelares en su contra. Al interior de la Fiscalía Regional del Biobío se sabía desde tempranito que el compipa se iba de excursión al extranjero.

"El fiscal recibió la información de que este joven estaba saliendo del país, por eso pidió una orden de detención, pero el Tribunal de Garantía se la denegó, así que ahora tendrá que evaluar si lo formaliza en ausencia o bien espera a su retorno", se indicó.

Verdugo sería formalizado el lunes junto a los otros 12 scouts que habrían agredido a Bagnara, por el delito de lesiones graves y gravísimas.